Life at the Limits: Stories of Amazing Species (La vida en los límites: Historias de Especies asombrosas) en el museo de Historia Natural de Nueva York del 4 de abril del 2015 al 3 de enero del 2016. La exposición explora, utilizando muestras, videos, exposiciones interactivas, y modelos, las diversas y, a veces, asombrosas estrategias que animales y plantas emplean para encontrar alimento, defenderse de los depredadores, reproducirse y prosperar en hábitats que cualquier otro ser puede encontrar inhóspitos o incluso letales.
Abarca diversos campos de la vida, desde como nacen (y por tanto se reproducen, mediante sexo, mitosis, curiosos rituales de apareamiento), como respiran y comen (con oxígeno limitado, nutrientes distintos, producir, robar, guardar para cuando no haya), admósferas inhóspitas (sin luz, sin temperatura o con exceso de calor, sin oxígeno), como se mueven o realcioan con su medio ambiente, protección y esperanza de vida (armaduras de protección, técnicas de ocultación, cambio de sexo, congelación por tiempo indefinido).
Peces de sangre transparente o capaces de sobrevivir sin agua durante años, buitres que vuelan a 11.000 metros, ballenas que nadan a 3.000 metros de profundidad o tardígrados que toleran la congelación y el hervor son los «superanimales» del museo de Historia Natural de Nueva York. La vida al límite demuestra cómo los organismos son capaces de adaptarse a absolutamente todo, desde las capas más finas de la atmósfera hasta las fosas más insondables del océano.
Algunos ejemplos:
Los únicos animales conocidos capaces de vivir sin oxígeno, los loricíferos.
La iguana de las islas Galápagos con una mutación que le permite beber agua salada y estornudar la sal que no necesite.
El pez pulmón africano sobrevive a las sequías gracias a su capacidad para enterrarse bajo tierra durante años sin comida ni agua hasta que la laguna se recupera.
El engullidor negro y su estómago flexible, que le permite comer animales más grandes que él.
El zorro fénec del Sahara, que ventila las temperaturas más altas del planeta a través de sus enormes orejas.
El escarabajo rinoceronte, capaz de levantar ochenta veces su peso.