Más allá de los tópicos, ser gótico implica mucho más que vestir de negro, llevar cruces y tener un sentimiento trágico de la vida. La Semana Gótica de Madrid, que en octubre tuvo su tercera edición, coinciediendo con la festividad de Halloween, demostró la riqueza de esta cultura a través de sus múltiples formas: el arte, la literatura, el cine, la danza, la moda y, por supuesto, la música. El Museo Nacional del Romanticismo fué la sede escogida para el evento, aunque el carácter multidisciplinar de la cita hace que las actividades se extiendieran a distintos escenarios.
1. Pasión: Como en el Romanticismo, se busca sobre todo la expresión de los sentimientos.
2. Oscuridad: Es una constante tanto en la corriente pictórica como en la literaria del Romanticismo. Los demonios, los ángeles caídos, los vampiros, los cuervos… El lado oscuro toma un cariz atractivo.
3. Ocultismo: Hay predilección por todo lo que no se conoce y que supone un misterio.
4. Creatividad: Se buscan nuevas vías para expresar los sentimientos y las emociones.
5. Rebeldía: Se quiere romper con lo establecido, con lo oficial y lo que mandan los cánones.
6. Decadencia: Se buscan valores pasados de moda, lo contrario del esplendor, la opulencia y la superficialidad.
7. Negro: Es el color que define al movimiento gótico, por su connotación oscura -aunque no todos los góticos se visten de negro-.
8. Romanticismo: Es el pilar cultural y la fuente de la que bebe el movimiento gótico en todas sus variantes.
9. Muerte: Tiene un gran atractivo, originado por el tabú social que conlleva.
10. Religión: Tiene gran influencia a raíz de la estética de las catedrales góticas y los cementerios. La cruz también tiene un gran simbolismo, más como objeto fetichista que como símbolo cristiano.
Vía: http://www.20minutos.es/noticia/1195222/0/goticos/semana-gotica/estetica/